No, no, no... el domingo por la noche tuve un sueño, soñaba que regresaba a Monterrey a visitar "Cola de Caballo" -no pude hacerlo cuando estuve allá-. Era un viaje expres, pero en él revivía de nueva cuenta el hermoso concierto de The Gathering, y bueno, ya saben, son la banda de mis amores.

Entonces, me desperté, fui al trabajo y seguía con esa adrenalina de mi sueño. Entré al sitio oficial de la banda, pues suelo checar con regularidad las fechas de los próximos conciertos, y en ellas estaban sólo las confirmaciones de Argentina y Chile, mismas que ya había visto semanas atrás y que me causaban tanta pero tanta envidia. Cerré la página y me puse a navegar entre los blogs y en uno de ellos vi que otro gatheriano decía que tocarían en Monterrey y D.F.

Sin pensarlo me metí al foro y ahí estaba, fechas confirmadas. ¡Ahhhhhhhh! Lo juro por Dios que sentí que se me iba a salir el corazón, otra vez de nueva cuenta va esto a ser regalo de cumpleaños, pues las fechas de los conciertos son el 16 y 17 de Marzo, y yo cumplo el 13 -no lo olviden o me deprimiré- y bueno... ahorita estoy que no me la acabo de la emoción y del estrés, tengo que comenzar a cotizar vuelos, hospedaje, comida y un sinfin de cosas, sólo sé que ¡TENGO QUE IR! pobre o no pobre pero tengo que ir; a ver cómo le hago, tendré que ponerme a trabajar más por mi cuenta como freelance y quedarme definitivamente sin ojos para poder acompletarme, y quién sabe... quizás estemos de vuelta en Monterrey o conociendo la enorme ciudad de México. Gathering estará en tierras mexicanas de nuevo y yo soy muy, muy, mucho muy feliz por eso. (:<

Diana
p.d. odio vivir en la punta del país y estar tan, pero tan lejos de la civilización musical.

Etiquetas: musica, the gathering

La tenía sentada en mis piernas, semi desnuda y con rostro de quién está acostumbrado a esta rutina. Para mí era algo nuevo, para ella era un cliente más.

-No haré nada que no quieras que te haga- expuso, y comenzó a moverse sensualmente.
Se retorcía sobre mí, me miraba de la manera más coquetamente barata posible, tan barata como los $150 pesos que es el costo total de esos tres minutos de placer superficial por el que todas las noches ella accede a brindar.

-Puedes tocarlas, son naturales, te lo prometo- repitió y se acercó un poco mas. Abrí las palmas de mis manos y las junté una con la otra. Era cierto, eran naturales. Era realmente extraño todo lo que sucedía, hace poco estaba comiendo un helado con un viejo amigo y un par de horas después me encontraba sentada en un pegajoso sofá negro, dentro de un pequeño cubículo color crema con una mujer que intentaba alterar mis sentidos al ritmo de “Crazy” de Aerosmith.

Ella hacía lo suyo con su cuerpo y yo lo mío con mis ojos, siempre he sido buena observadora, siempre intento ver mas allá de lo que tengo frente a mí y esta vez no fue la excepción. Mientras Ximena continuaba bailándome, comencé a charlar con ella de su vida, de sus hijas y de sus planes como futura empresaria. A diferencia de sus otros tantos clientes que acuden con ella para que los escuchen, era yo quien pagó para escucharla, para que me contara todo lo que desea en su vida, de lo mucho que aborrecía bailar todas las noches en un maldito table dance sólo para poder sostener a sus hijas y de cómo piensa sacarlas adelante. Ximena continuó y continuó hablando hasta que terminó sentándose de la manera más cómoda posible, ahora ella estaba completamente postrada en mis piernas.

La canción terminó, el show debía continuar pero Ximena seguía platicando conmigo y yo seguía atenta a todo lo que me decía. Le hicieron un llamado para que se apresurara pero ella no hizo caso, realmente la conversación era buena y ella no quería irse. Un llamado más nos interrumpió de nueva cuenta, por lo que Ximena suspiró un tanto molesta. Movió sus grandes ojos verdes hacia arriba e hizo un gesto de descontento. Me miró ya no con la mirada barata de hacía unos minutos, sino de una manera amistosa.

Ximena se veía contenta, y aun sobre mis piernas, me sonrió y me dijo “gracias”. Se levantó, me tomó de la mano y me llevó de regreso a la mesa con mis amigos. Ellos comenzaron a chiflar y hacer estruendos. Yo sonreía satisfecha de esta experiencia, ellos de picardía y morbo, y Ximena sonría distinto, de nueva cuenta ofrecía sonrisas falsas para quienes estuviesen interesados en comprar poco más de tres minutos de felicidad volátil e impalpable.

Ximena no dejó de sonreír en toda la noche, y yo también.
Diana

Hoy me dieron un consejo que me ha dejado sin palabras y a continuación de los comparto:

"No metas el chile de donde sacas la papa"
R. Yáñez 2007

Me lo mandó mi amigo Frank y bueno aquí cumpliendo con las "5 cosas que no sabes de mí" y ahora yo le paso la "bolita" a Ka!, B, Dr. Muerte, Paranoid y a Maur0




1. Aprendí a peinarme hasta los 20 años y cómo no podía hacerme una coleta completa comencé con dos colitas que se convirtió en un icon de mi "look".

2. Tengo operadas las uñas de los pulgares mis pies y ya no me crecen.

3. Tengo pecas en las mejillas y en la nariz aunque pocos se han dado cuenta de eso.

4. Todos piensan que mi color preferido es el rosa, pero en realidad siempre ha sido el rojo.

5. No puedo conducir con otro tipo de calzado que no sean mis converse, cuando traigo tacones u otro zapato tengo que manejar descalza.

He encontrado a la "Paquita la del barrio" de Perú.
¡Disfrútenlo!
Diana

Por un momento dudé de mi ininterrumpida lucidez, y pregunté el nombre de la ciudad donde vivo; -Hermosillo- todos me han respondido y yo sigo dudándolo, y como no hacerlo, con un grandísimo carajo, estos días no se parecen en nada a lo que Hermosillo es. Cualquiera que viene temporalmente y le han tocado unos días como estos, no me creería que en verano alcanzáramos 46 a 47 calurosos y sudorosos grados centígrados. ¡Demonios!

Y pensar que por un momento de mi vida figuró la idea de solicitar aquella beca para irme de intercambio a Rusia. ¡En qué estaba pensando! ¡Por Dios! ¡Eso no es posible! Y es que con este paralizante frío, he revivido más de un recuerdo que tiene como principal actor al helado clima; como ese anhelado deseo de poder tocar la nieve con mis manos, hacer bolas y lanzarlas por el aire. Burrrr…

Pero no, no creo que este tipo de vivencias las pueda realizar, con 2°C los que hemos estado teniendo desde el sábado por la noche y con esos dos he tenido más que suficiente para comprender que una mujer del desierto no está diseñada para soportar aventuras que implican nieve, frío y narices rojas como las de Rodolfo, el Reno. Yo estoy incapacitada para ello.

Desconozco totalmente mi ciudad, no puedo hacer nada cotidiano, ¡ni siquiera ir al baño tranquila! porque sé que al terminar, tengo que mojarme las manos y eso implica que estarán heladas, muy heladas y no habrá un par que las tome, las junte a las suyas y les proporcione un poco de calor, calor que en este instante me hace falta, con una cama tan grande y con una sola cobija para arroparme. Yo no sé si pueda sobrevivir sola a esta noche tan, pero tan, tan terriblemente fría… igual que mis manos frías, igual que mis pies fríos, pero no a mi férvido corazón, porque el corazón de una mujer del desierto está siempre ardiente y caluroso, a pesar de que ella se encuentre sola, a pesar de pasar los inviernos de la manera más helada y solitaria. La mujer del desierto sabe que pronto, muy pronto la primavera está por comenzar.

Diana
p.d. 2°C para los sonorenses es equivalente a -10°C para la gente que vive en el sur de México. ¿va?

-Entré a “Hot Topic” y pregunté por unas playeras de The Gathering, me dijeron que no tenían, pregunté por otra cosa de ellos, alguna calca, un llavero… no sé, algo y no tenían nada. Te busqué alguna otra cosa linda pero hallaba nada que fuera para ti, hasta que vi esta pulserita y dije es para Diana-

Esas fueron sus palabras y me entregó una linda pulserita negra que lleva grabado “Music = Life” y sin temor a caer en exageraciones es uno de los regalos más bonitos que me han obsequiado . Gracias.

De verdad muchas gracias, me gustó mucho, mucho, muchote.
Diana
p.d. Y como estamos hablando de música, les recomiendo escuchar "Travel" by The Gathering.

Testimonios y reacciones de los principales afectados:

"Llegué en la mañana y ya estaba así"- Una compañera de trabajo.

"Yo no sé... o sea yo no la dejé prendida, porque si se queda prendida es cuando se descompone ¿no? porque me dijeron a mí que eso pasa pero yo no la dejé prendida"- El sujeto mas sospechoso de los posibles culpables de esta trágica muerte.

"¿Se descompuso? Pues sepa... yo ni tomo café de ese, porque o sea teniendo buenos cafés en la ciudad ya me acostumbré a los buenos, o sea yo me lo tomo saliendo de aquí o lo preparo en mi depa" - Un arrogante de oficina.

"¿Otra vez? mmmmmmmm" -El Jefe, quien paga y revive nuestras cafeteras.

"¡¡¡¡Qué!!!!! NOOOOOOOOOOOOOO llévame a mí primero, señor llévame a mí primero, ella no tiene la culpa, sin ella mi vida no tiene sentido, no valgo nada... ayyy >:( - Una diseñadora adicta a la cafeina.

Diana
p.d. Y yo que andaba estrenando taza snifff...

No sé por qué y tampoco sé cómo. Nadie me lo pidió, nadie dijo que debería ser así, pero así es, así se ha dado esta manera desenfrenada de quererte, esa necesidad de protegerte sin que me lo pidas, sin que lo necesites, pero lo siento dentro de mí, siento que debo cuidarte de posibles e invisibles peligros, que debo celarte de quienes no te aprecian, que tengo que hacerlo, aunque tú, no me lo pidas.

No he podido decirlo abiertamente, me da pánico ver las reacciones de los demás. Maldita moral que tiene que regir incluso hasta en mi corazón, que me limita y me oprime, que me hace terminar inmediatamente mis suspiros cuando te veo, que trata de cambiar lo que siento, que me obliga a reconsiderar en todo esto en lo que siempre pienso.

Sé que es una tontería, pero con el paso de los años esto ha ido incrementando, y simplemente ya no puedo contenerlo, es demasiado el cariño que te tengo, y… aunque no me lo pidas, aquí lo tienes es tuyo: yo te quiero.

Aunque nunca lo sepas de mi boca, de mi corazón tienes todo esto que guardo aquí dentro, que nació de la nada y en la nada terminará, porque nunca me lo pediste, porque nunca has imaginado que es para tí, porque nunca has pensado que todo esto es tuyo y que esto es eso que todos llaman amor y este tonto amor es sólo para tí. Aunque nunca, nunca, nunca… me lo pidas.

Diana

Locación: Sábado en la oficina.
Situación: Diana vino voluntariamente a trabajar, pues esta semana no avanzó mucho en sus proyectos. Como ella está aparentemente sola en su cubículo decide escuchar música y pone a tocar al "grupo prohibido": Epica.

Han transcurrido pocos minutos cuando se percata que no está sola. la cabeza de un compañero sobresale un poco del monitor; tiene una mirada de enfado, luce un rostro lleno de estrés. Diana sabe que a él no le agrada el grupo, pero está escuchando "Run for a fall", su canción favorita. Aunque ella "debería" de parar la canción y dejar todo de nueva cuenta en silencio no puede pararla. Ella quiere hacerlo, sabe que debería hacerlo, pero Dios, es una canción tan hermosa, tan buena que su interior musical definitivamente no se lo permite. Segundos después él dice lo siguiente:

-Diana, ¿No traes tu ipod?
-No, no lo traigo.
-Y de pura casualidad... ¿No traes los audifonos del ipod que me puedas prestar?-
-No... tampoco los traigo-
-¿Y otros audifonos?-
- .......................................

Conclusión. Después de eso, Diana tomó el disco de "The Phantom Agony" y lo puso a tocar completo y admiró la manera tan sútil y cortés de demostrar el descontento de su compañero hacia su música y digo yo ¿existe acaso una manera más amable de decirle a alguien "no soporto tu música"?

La semana pasada tuve que ir a realizar unas compras de emergencia –de esas mejor llamadas "encarguitos" de mamá- Atravesaba por el pasillo de los licores velozmente cuando de pronto, algo activó mi octavo sentido súper-mega-sensorial que tenemos los diseñadores: la vista de águila o mejor dicho lo asquerosamente quisquillosos que solemos ser para ciertas cosas.

No pude evitar retroceder unos cuantos pasos y ver atentamente las dos botellas de vodka que se encontraban frente a mí. Me quedé observándolas unos segundos y comencé a reírme; a reírme sin poder contener la risa. ¡Tremendo cinismo tenía frente a mis ojos y con las prisas casi lo me lo pierdo! ¡Y cómo perderme la "nueva imagen" del vodka Oso Negro!

Oh sí, el "osito negro", aquél oso perverso que hace un par de años tuvo la osadía de rasgarme con sus garras. Ese maldito oso del carajo que me tumbó en una banqueta fría y solitaria y que me dejó como recordatorio de una noche de copas, una tremenda resaca en la que no podía ni colgar una sola esferita del árbol navideño que con tanta jodería había estado acosando a mi madre para que lo pusiera. Oh sí, maldito oso negro… No deja de ser un vodka de lo más guarro y peligroso, para quiénes nos atrevemos a desafiar al endemoniado oso negro que reposa en forma líquida en una botella de un litro. ¡Un litro de puro veneno!

Tiene ya tan mala fama que ahora, el infeliz intenta camuflajearse entre las bebidas de prestigio, invirtiendo los colores de sus etiquetas, imitando sutilmente las formas de sus botellas para pasar desapercibido. Pero lo que él no sabe es que como dice el viejo refrán "aunque la mona se vista de seda, mona se queda" y compadezco a todos aquellos que se confundan al tomar de esa botella, aquellos que crean que el oso ha cambiado, y que continuarán creyendo que con un nuevo atuendo deja de ser todo lo repulsivo que ha sido y que nunca dejará de ser.

Diana
p.d. desde entonces odio el vodka, me da asco, asco, asco, mucho pero mucho asco.