Estoy desesperada, me siento como cuando una madre ve partir de su casa a su último hijo, el que "parecía que no se casaba" y que tómala siempre sí dijo "acepto". Cuando este hijo parte de casa, la madre ya no tiene a quién lavarle, a quién cocinarle, tenderle su camita... Y ahora yo, lo estoy viviendo en carne propia ¡Es horrible! ¡Estoy de vacaciones hasta el 18 de Septiembre! y ya quiero regresar a trabajar. No tengo a quién serle útil, no tengo quién me diga "necesito de tu ayuda". Me siento como la pobre madre sin tener qué hacer en el resto del día más que recordar lo feliz que era mientras su hijo vivía con ella. ¡Deprimente!
Yo sé que es bueno tener tiempo para uno mismo pero... ¿Tanto? Me siento desempleada, sin una razón para levantarme por las mañanas y echar andar el Illustrator. El café no me sabe igual, mi taza blanca no me acompaña y... me deprimo.
Hoy no lo pude evitar, y fui a la oficina, aunque sea de noche; pretexto asqueroso: "vengo por mi agenda y por unas fotos", ¡Bah! como si eso no pudiera esperar, como si tuviera tantos compromisos y trabajos que anotar en ella. ¡Que asco de falsedad! Pero necesitaba tomar el Navarrete final y ¡Sorpresa! ya le pintaron las rayitas de los carriles y yo ni cuenta me había dado. No creo que alguien pueda entender la magnitud de esto, pero es mi caminito al trabajo de todos los días, "el Navarrete final" ¡Y no había visto las rayitas de los carriles! tenía tantos, pero tantos, tantos días preguntándome cuándo las pintarían ¡Y ahora no sé exactamente cuando lo hicieron!
Quizás no lo entiendan, porque creo que apenas y yo lo estoy comprendiendo, pero estos días me han servido para darme cuenta que el Diseño es la única relación -por más enfermiza que sea- que poseo y que sin él, en mis ratos de ocio me da por hacer locuras. ¿A quién se le ocurre ordenar los calcetines por tono y textura? :/
¡Ohhhhh! mi Diseño querido... no te alejes de mí, abrázame vectorialmente toda esta noche que me siento muy sola, muy sola...
¡Ok! ¡Suficiente! ¡Tú ganas! Tengo que decirlo antes de que termine este post porque si no me voy ahogar ¡Sí, sí, lo admito, lo admito! ¡Ya sabes que te amo y que mis ojeras y yo no podemos estar sin tí! Awww... no lo volveré a repetir hasta dentro del próximo año que me toquen mis vacaciones, disfrútalo.
Diana
p.d. ya sólo nos quedan 14 días más para reunirnos de nuevo.
Etiquetas: diseño, freak, trabajo, triste, vacaciones
Yo se lo que siente...estar desempleado, digo, de vacaciones, no es muy cool :p