Este post se lo quiero dedicar a dos amigos muy queridos para mí: Brenda Santos y Judas Mendez los nuevos egresados de Lic. en Ciencias de la Comunicación que se suman hoy a la lista de jóvenes profesionistas desempleados. Jajajajaja ¡triste realidad!
La fiesta estuvo bastante bien, abundaron los cacahuates botaneros, los chocolates hershey's, galletas ritz para untarles queso philadelphia (guácala) y nunca nos faltó lo más importante: un buen trago. En el centro de la mesa, se encontraba una botella enorme de tequila imponiéndose como ser supremo de la noche, retando a cualquiera a beberlo y salir caminando en sus cinco sentidos. Nadie se atrevió.
Yo, la conductora oficial de la noche y nueva rehabilitada de toda bebida alcohólica sólo me enfoqué a otros detalles que no eran tan seductores como el atractivo tamaño del tequila o su vistoso empaque. Uhmmmm se preguntaran ¿qué clase de detalles? poco relevantes, para ser honesta bastante estúpidos, ¿qué otra me opción tenía? me entretuve con un vestido espantoso sacado de un cuento de hadas color negro con aplicaciones doradas, unos viejitos bailadores bien curados que fueron los amos y señores de la pista, el enorme escote de una graduada, el cuál ponía en duda lo legítimo que podían ser sus pechos. Y otros detalles por el estilo...
En resumen la pasé bien, botaneé agusto, no bebí, conversé lo suficiente, viboré en exceso, tomé varias fotografías y regresé temprano a casa.
Uhmmm, creo que ya estoy algo obsoleta para éste tipo de eventos.
c'est la vie
Diana
Ay nanita, qué bonita.
Lo sé, suena mal pero es lo mejor que pensé, te ves bastante chula. a ver si nos mantenemos en contacto aunque sea por los blogs. No te vayas con la finta, mi blog ya está a punto de regresar.
-EL Autor.